miércoles, 22 de octubre de 2008

What a horrible day:

Hoy ha sido un día malo, lo reconozco. He cometido errores y lo asumo. Me he puesto hecho una furia porque nada salía bien y, obcecado como estaba, no he hecho sino empeorar las cosas. Es verdad que ha servido para darme cuenta de nuevo de que cuando tengo problemas reales nadie mueve un dedo para ayudarme. Nada que no supiera ya.

Cansado como estoy, retozo entre las sábanas de mi cama intentando dar descanso a mí embotada cabeza. Tengo cosas que hacer en casa pero he decidido hacerlas mañana. Nada es realmente tan importante como para comerse la cabeza. De nuevo, tras la vorágine de los últimos tiempos y el exceso (voluntariamente asumido) de trabajo, he tenido que parar las máquinas y reflexionar un poco sobre el estrés que llevo y sobre la vida en general. Me he dado cuenta de que, a esta edad, casi todas las metas básicas que me había marcado en cuanto a mi formación humana, se han realizado. Otras metas, un tanto más utópicas, dudo que se lleguen a realizar. Hay que tener en cuenta, claro, que cada ser humano tiene sus propios tiempos acorde a sus metas y que por tanto, algunos necesitamos menos tiempo para realizar lo más modesto de nuestros proyectos. Queda entonces una inquietante sensación de que todo está hecho, de que la vida es esto y de que los próximos 50 años son más de lo mismo.

Según escribía estas últimas líneas, incluso he tenido la sensación de estar repitiéndome peligrosamente. Creo haber escrito algunos textos parecidos con este, en esos tiempos (no hace mucho) en que me dedicaba con mayor intensidad a la reflexión literaria, sin es que puedo osar considerarme siquiera literato.

Ya intentando acabar el presente texto, se me viene a la cabeza una última reflexión: ¿por qué sigo viviendo entonces, llevado por la inercia vital si tengo el convencimiento de que todo está hecho? La respuesta es algo sorprendente y procede, sin duda, de algún lugar remoto de mi conciencia. Algún lugar o tiempo que no conozco. Algo vivido, inducido o eternamente repetido como un eco del universo. Una sensación, en definitiva, de que el destino algún día me pondrá mi oportunidad en bandeja. Hasta entonces, sólo tengo que permanecer en la monotonía de la paciencia hasta llegar a estar a la altura de mi propio destino.

Mr.X, Lisboa a 22-10-2008.

4 comentarios:

Unknown dijo...

me parece que necesitas otra visita a barcelona...

Mr.X. dijo...

yeap

Anónimo dijo...

Sino vamos nosotros a visitarte a Lisboa tio !!! A full rollo MAGIC...

Animos !!

wholesale dijo...

Yiwu.hk, No.1 trusted discount wholesale site. Wholesale products from Yiwu at lowest price, for all your cheap wholesale needs!

More and more global importers, trading companies, worldwide wholesalers buy China wholesale products from Yiwu - the world's largest wholesale market of small commodities at cheapest wholesale prices.