jueves, 15 de noviembre de 2007

Carretera perdida a Teufelsberg

He leído en El País una noticia graciosísima: David Lynch se ha comprado la Teufelsberg, más conocida como la montaña del diablo de Berlín. Si piensas que sólo un loco excéntrico millonario como el cineasta podría gastarse una pasta en una colina artificial para construir una universidad esotérica, no vas mal. Al parecer, el creador de Twin Peaks, pertenece a una secta, Transzendentale Meditation, que venera la colina berlinesa de 115m de altura creada a partir de los escombros provocados en la ciudad durante los bombardeos de la II Guerra Mundial. ¡Increíble! La secta esotérica en cuestión, según la Sociedad Federal de Asesoramiento sobre Sectas (sí, existe una asociación preocupada por el bienestar legal de las sectas), agrupa a 2.000 adeptos en Alemania que practican una forma de meditación que inventó Maharashi Maheshi Yogui en los años 50. Como cualquier secta que se precie promete curas, levitación y no sé cuántas cosas más, siempre, por un módico precio. Lynch ha asegurado que medita desde hace 35 años, como quitándole hierro al asunto. Haciendo este tipo de compras, con una inauguración con antorchas y la gurú germana (Raja Emanuel), entiendo, en parte, algunas de sus flipadas fílmicas.

No hay comentarios: